Diseño de empaque
A pesar de ser un líder en su segmento de mercado durante muchos años, cuando la marca Clorets, a través de Cadbury Adams se puso en contacto con Top Design, se enfrentaba al reto de renovar su imagen para conectar con los consumidores más jóvenes que la percibían como una marca anticuada y rígida.
Los chicles que habían acompañado a una generación completa parecían haberse quedado detenidos en el tiempo y no lograban resonar con las necesidades de nuevos y más jóvenes consumidores que los desplazaban fuera de su top of mind cada vez más rápido.
Top Design se encontró con el objetivo de generar una nueva comunicación visual que conectara con estos adolescentes y adultos jóvenes de una manera creativa e incluyente. Además de esto, se debía incrementar la visibilidad del empaque en el anaquel mediante gráficos impactantes logrando rejuvenecer a la marca de una forma dinámica y original.
El equipo comenzó sus explorativos utilizando gráficos inspirados en elementos tribales que comúnmente le daban vida a expresiones urbanas como el graffiti o los tatuajes, dándoles la vuelta para presentarlos desde un ángulo novedoso. Con base en estos elementos, se comenzaron a definir los significados que este lenguaje comunicaría, exponiendo con claridad los nuevos valores de la marca.
Aunque implicó todo un reto acuñarse la responsabilidad de darle un refresh a una marca tan representativa de la cultura popular, este rediseño y sus respectivas campañas de publicidad fueron todo un éxito. La marca logró reposicionarse en la mente de un sector más joven sin perder a su fiel consumidor base.